DIOS MÍO, DIOS MÍO,
¿POR QUÉ ME HAS ABANDONADO?
¿POR QUÉ ME HAS ABANDONADO?
Al verme se burlan de mí,
hacen visajes, menean la cabeza;
acudió al Señor, que lo ponga a salvo,
que lo libre si tanto lo quiere.
DIOS MÍO, DIOS MÍO,
¿POR QUÉ ME HAS ABANDONADO?
¿POR QUÉ ME HAS ABANDONADO?