EL SEÑOR HA ESTADO GRANDE,
GRANDE CON NOSOTROS;
Y ESTAMOS ALEGRES,
Y ESTAMOS ALEGRES.
1. Cuando el Señor cambió la suerte de Sión,
nos parecía soñar;
la boca se nos llenaba de risas,
la lengua de cantares.
2. Hasta los gentiles decían,
el Señor ha estado grande con ellos;
el Señor ha estado grande con nosotros,
y estamos alegres.
3. Los que sembraban con lágrimas,
cosechan entre cantares;
al ir iban llorando, llevando la semilla,
al volver, vuelven cantando, trayendo sus gavillas.